La posición del Wing Chun es extremadamente móvil y permite al practicante del Wing Chun moverse rápidamente desde su centro de masa en cualquier dirección.
Debido a las ventajas de una posición de frente (o de frente), el practicante del Wing Chun siempre intentará permanecer de frente a su oponente. Esto se logra fácilmente a través de un pequeño giro del cuerpo.
Incluso cuando no está de frente a su oponente, el practicante del Wing Chun puede defenderse de manera efectiva ya que la línea central se adapta automáticamente a la posición de su oponente.
Esto permite al practicante del Wing Chun responder de manera eficiente y efectiva a un ataque lateral cuando no hay tiempo suficiente para girarse y encarar al oponente de frente.
En situaciones apropiadas, también se pueden dar patadas a un costado del cuerpo.